Las nuevas tecnologías que tenemos hoy día son inofensivas y muy útiles, y no me refiero a que no dañen la vista, la espalda, o que a los niños de las ultimas generaciones no se les vea jugando en la calle, en ese aspecto sí son dañinas, pero yo me refiero a algo mas humano como las relaciones personales, que nadie se engañe diciendo que enganchan, alejan personas, que hacen que la gente se oculte detrás de una pantalla. Lo que les da miedo es que se vea su verdadero yo. Lo peligroso y dañino en realidad son las personas y como las utilizan con los demás. No las máquinas.
Siempre tenemos que escuchar cosas como no respondo porque me da pereza sin pensar que detrás de ese mensaje hay una persona que ha pensado en ti y ha empleado unos minutos de su tiempo en escribirte y después espera tu respuesta. Quien te ha escrito no es una maquina, recuerdalo, es una persona.
No eches la culpa a su funcionamiento para disculparte tu mismo de tu dejadez humana, si te quedaste sin batería o si la web o el móvil son lentos puedes responder cuando recargues o funcionen mejor, y si no conoces el numero de alguien para llamar o contactar simplemente pregunta, si eres una persona falsa al menos admítelo y mira adelante, no a tu querido smartphone u ordenador como culpable de tu personalidad dejada y fría.
Si tienes amigos que viven lejos la culpa verdadera de un distanciamiento no la tiene la distancia física, hoy día no existen las distancias reales cuando podemos comunicarnos cuando queramos con otras personas a tiempo real, hay distancia física pero no comunicativa.
Al otro lado de ese numero, esa cuenta de facebook, o esa aplicación hay una persona, un cerebro pensante, no un trozo de plástico u otro material que no ve ni oye. En la era moderna la gente no ha perdido valores, sino que ha mostrado su lado menos amable que siempre estuvo ahí.
Siempre tenemos que escuchar cosas como no respondo porque me da pereza sin pensar que detrás de ese mensaje hay una persona que ha pensado en ti y ha empleado unos minutos de su tiempo en escribirte y después espera tu respuesta. Quien te ha escrito no es una maquina, recuerdalo, es una persona.
No eches la culpa a su funcionamiento para disculparte tu mismo de tu dejadez humana, si te quedaste sin batería o si la web o el móvil son lentos puedes responder cuando recargues o funcionen mejor, y si no conoces el numero de alguien para llamar o contactar simplemente pregunta, si eres una persona falsa al menos admítelo y mira adelante, no a tu querido smartphone u ordenador como culpable de tu personalidad dejada y fría.
Si tienes amigos que viven lejos la culpa verdadera de un distanciamiento no la tiene la distancia física, hoy día no existen las distancias reales cuando podemos comunicarnos cuando queramos con otras personas a tiempo real, hay distancia física pero no comunicativa.
Al otro lado de ese numero, esa cuenta de facebook, o esa aplicación hay una persona, un cerebro pensante, no un trozo de plástico u otro material que no ve ni oye. En la era moderna la gente no ha perdido valores, sino que ha mostrado su lado menos amable que siempre estuvo ahí.
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